El motor eléctrico de imán permanente ofrece una potencia máxima de 100 kw/110 CV y puede alcanzar un par de 260 Nm. Ofrece un placer de conducción óptimo: vibraciones reducidas, motor silencioso y cero emisiones.
El motor eléctrico está asistido por otros dos elementos:
- inversor: permite transformar la corriente continua proporcionada por la batería en la corriente alterna utilizada por el motor eléctrico. El inversor se encuentra entre la batería y el motor eléctrico.
- reductor: un coche eléctrico no tiene caja de cambios sino un reductor. Este permite adaptar la velocidad de rotación del motor eléctrico al rango de velocidad habitual de un coche.